domingo, 2 de noviembre de 2014

ESTRATIGRAFIA

Geológicamente el territorio del Departamento del Tolima está conformado por rocas ígneas, metamórficas y sedimentarias con edades entre el Proterozoico y el Neógeno, así como acumulaciones sedimentarias, volcánicas y volcano-clásticas del Holoceno y Reciente . Estas rocas han sido agrupadas en unidades tiempo (cronoestratigráficas) y unidades roca (litoestratigráficas), algunas con denominación informal y otras que cumplen con las recomendaciones de la Comisión Estratigráfica de Norteamérica


La descripción de la estratigrafía se hará por unidades tiempo y dentro de ellas por unidades litológicas, incluyendo datos sobre el proponente del nombre, área o áreas de exposición, tipo de roca que conforma la unidad, edad y posibilidades de utilización, entre otros aspectos.

PROTEROZOICO

El Proterozoico en el Departamento del Tolima está representado, exclusivamente, por rocas producto de metamorfismo regional, facies anfibolita hasta granulita. Generalmente afloran como franjas alargadas, en las estribaciones orientales de la Cordillera Central, en contacto fallado con metamorfitas del Complejo Cajamarca o como xenolitos y techos pendientes de extensión variable, dentro del Batolito de Ibagué. Las labores de cartografía geológica han permitido diferenciar tres unidades,expuestas todas en el ámbito de la Cordillera Central 
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Neises Biotíticos delDavis (PÎnd)

Murillo et al., (1982) y Esquivel et al., (1987),utilizaron este nombre para designar una unidad litológica, de carácter metamórfico, conformada por neises de cuarzo-feldespato-biotita, con algunas intercalaciones de anfibolitas y mármoles.


La unidad se presenta como xenolitos y techos pendientes dentro del Batolito de Ibagué, cubriendo buena parte de la cuenca del río Davis y los nacimientos de los ríos Amoyá y Ambeima, al suroccidente del departamento. Dadas las características petrográficas y estratigráficas similares con otros conjuntos litológicos en otras zonas de la Cordillera Central, en Colombia, los proponentes del nombre postularon una edad proterozoica para el conjunto y la asimilaron al denominado por Kroonenberg (1981), "Cinturón Granulítico Garzón - Santa Marta". La lejanía de los sitios de exposición y la carencia de vías de comunicación impiden, hasta el presente, la posibilidad de explotar comercialmente las zonas de mármoles incluidas dentro del conjunto.

Complejo Icarco(PÎi)

Se trata de un conjunto de rocas metamórficas de medio a alto grado de metamorfismo, con sucesión litológica, estructural y tectónica confusa, para el cual Murillo et al., (1982) y Esquivelet al., (1987), adoptaron el nombre de Complejo Icarco.

Las exposiciones de la unidad se encuentran en los ríos Blanco y Mendarco y la quebrada Icarco, al occidente de la carretera Chaparral - Rioblanco; igualmente aflora sobre algunas careteras que parten de esta última vía y llevan a La Marina y La Profunda.

El contacto del complejo con el Batolito de Ibagué es de tipo intrusivo, con desarrollo de zonas migmatíticas, pero sin efectos térmicos importantes. Algunas de las estructuras migmatíticas observadas en la unidad, en concepto de Muñoz y Vargas (1981), se deben a efectos metamórficos.

La unidad está conformada por diverso tipo de rocas que se mezclan en una forma no muy bien establecida y difícil de separar cartográficamente. Las rocas más frecuentes son anfibolitas, neises de cuarzo-feldespato y neises anfibólicos; subordinados afloran neises biotíticos, cuarcitas y granulitas. Estas variedades litológicas son bien descritas por Muñoz y Vargas (1981).

Al igual que para los Neises del Davis, los investigadores que describieron la unidad propusieron, basados en comparaciones regionales y similitudes petrográficas, edad proterozoica para el Complejo Icarco.

Neises y Anfibolitasde Tierradentro(PÎnat)

Barrero y Vesga (1976) utilizaron este nombre para describir un conjunto de neises y anfibolitas, que aflora como una franja alargada en dirección N-NE, en las estribaciones de la Cordillera Central, al norte del Departamento del Tolima. Asociaciones litológicas similares se conocen en varios otros sectores, como el occidente y sur de
Ibagué.

Excelentes exposiciones se encuentran en el río Cocora y sus afluentes las quebradas Chorros Blancos y La Negra, al SW de Ibagué; también en las carreteras Ibagué - San Juan de La China - Lisboa - Anzoátegui, San Felipe - Falan , Veracruz - Anzoátegui y Venadillo - Santa Isabel y la región de Convenio y Tierradentro, en el norte del departamento.

La litología más frecuente es de neises cuarzofeldespáticos, frecuentemente biotíticos, neises anfibólicos y anfibolitas; con menos frecuencia o en forma muy subordinada se encuentran, en orden decreciente, mármoles, cuarcitas y granulitas. Por la asociación litológica y la similitud petrográfica con rocas cartografiadas en otros sectores del territorio colombiano, en donde han sido datadas radiométricamente (KROONENBERG, 1981; ALVAREZ, 1981), se han ubicado estas rocas en el Proterozoico. Esta edad se ha confirmado, en parte, con la datación de una anfibolita en 1.360 ± 270 Ma (Tabla 1), al norte del Tolima (VESGA y BARRERO, 1978).

Los Neises Biotíticos del Davis y el Complejo 20 

Alberto Núñez Tello

Icarco, con base en su litología y relaciones estratigráficas son equivalentes con los Neises y Anfibolitas de Tierradentro. Entre San Juan de La China y Lisboa y en otras zonas del norte tolimense, se explotan los mármoles asociados a la unidad.

PALEOZOICO

Rocas metamórficas, sedimentarias e ígneas de edad paleozoica afloran en el Departamento del Tolima, exclusivamente en la Cordillera Central  Para su representación cartográfica han sido agrupadas en una unidad metamórfica, cuatro sedimentarias y dos ígnea

Complejo Cajamarca (q,ev,es)

Se utiliza este nombre, propuesto por Maya y González (en edición), para describir un conjunto de rocas metamórficas que conforma el núcleo de la Cordillera Central y que fue inicialmente llamado por Nelson (1962) Grupo Cajamarca. 
La unidad aflora sobre las carreteras Ibagué- Cajamarca-La Línea, Ibagué-Juntas, Armero- Líbano, San Felipe-Falan, Fresno-Delgaditas y en la mayoría de las corrientes de agua y carreteables que cortan el flanco oriental de la Cordillera Central.

El complejo está conformado por una gran variedad de rocas, producto de metamorfismo regional de medio a bajo grado, facies esquisto verde hasta anfibolita. La litología más frecuente es de esquistos de clorita-albita-epidota, clorita-albitaactinolita, cuarzo-sericita-grafito, cuarcitas y cuarcitas biotíticas. Los colores dominantes son verdes y grises a negros. Subordinadamente se encuentran mármoles, esquistos micáceos, esquistos anfibólicos y ocasionalmente anfibolitas. Las relaciones estratigráficas, entre las diferentes litologías, son complejas; Feininger et al., (1972) considera que las cuarcitas representan
la parte más alta de la secuencia. La secuencia litológica original debió estar conformada
por sedimentos ricos en materia orgánica, arenas cuarzosas, flujos lávicos y depósitos
de tobas, conformando una acumulación volcanosedimentaria marina.

Hasta la fecha no se han encontrado fósiles que permitan dar una edad precisa para la unidad. En diferentes zonas de la Cordillera Central se han efectuado dataciones radiométricas, especialmente por el método K - Ar, que han dado una gran variedad de cifras entre el Paleozoico y el Paleógeno (Tabla 1). Con base en esta información, diferentes autores han planteado edades que se extienden entre el Proterozoico y el Cretácico - Paleógeno. Las más recientes son tomadas por Restrepo y Toussaint (1988), Toussaint (1993) y Toussaint y Restrepo (1994), como evidencias
de un origen alóctono para el Complejo Cajamarca. Algunos otros autores consideran que
las edades cretácico-terciarias corresponden a eventos térmicos superpuestos a los eventos metamórficos regionales. La información existente no permite aún, con suficiente certeza, apoyar una u otra hipótesis.

En el Complejo Cajamarca se conocen y explotan varias mineralizaciones filonianas de oro-plata, asociadas a intrusivos y pórfidos. Igualmente se explotan zonas talcosas y roca de enchape, provenientes de los esquistos verdes (cloríticoactinolíticos).

Formación Anabá (Pzan)

Núñez y Murillo (1982) emplearon este nombrepara identificar una secuencia litológica de origen sedimentario, con zonas de muy bajo grado de metamorfismo, que aflora como una franja estrecha al oriente de la cabecera municipal de Ortega, en las estribaciones de la Cordillera Central.

Los mejores afloramientos se presentan sobre los ríos Anabá, de donde toma su nombre,
Ortega, Loany y Toy. La litología consta de lutitas y limolitas, con algunas filitas de color gris oscuro a negro; estas rocas son cuarzosas con contenido variable de
biotita, muscovita, sericita y a veces clorita. Con menos frecuencia se encuentran areniscas de grano fino cuarzosas. En algunos sitios se intercalan niveles calcáreos, levemente marmorizados, de color verde con abundante cuarzo.

La Formación Anabá está intruida por el Batolito de Ibagué, por lo que su edad es claramente prejurásica. Sin embargo, la ausencia de fósiles no permite dar una certeza sobre su época de depositación. Por comparaciones regionales y, especialmente, con base en las semejanzas litológicas con la Formación Amoyá, se propone una edad paleozoica para esta unidad, no pudiéndose confirmar otra más precisa.

Formación Amoyá (Pza)

Este nombre fue propuesto por Núñez et al., (1982), para designar una secuencia monótona de rocas finogranulares oscuras, con intercalaciones esporádicas de areniscas
cuarzosas, de grano fino. Los primeros afloramientos estudiados se encontraron al occidente de Chaparral, sobre el río Amoyá.

La Formación Amoyá consta de un conjunto sedimentario con predominio de lodolitas, lutitas y limolitas silíceas grises y negras, finamente laminadas. En varios sitios se aprecia un lustre sedoso, que imprime a las rocas un aspecto pizarroso. Ocasionalmente se encuentran niveles de areniscas cuarzosas de grano fino y compactas.

La complicada situación estructural y el intenso tectonismo, han impedido obtener una
secuencia litológica completa, por lo que se desconoce su espesor.La formación, aparentemente, descansa en contacto discordante sobre metamorfitas proterozoicas y subyace, también discordantemente, bajo rocas de la Formación Saldaña. El Batolito de Ibagué, diques y cuerpos irregulares afaníticos y porfiríticos la intruyen,  desarrollando leves efectos térmicos.

Por comparaciones regionales y análisis de la posición estratigráfica, Núñez et al., (1984) consideran que la Formación Amoyá podría ser del Cámbrico - Ordovícico o del Paleozoico superior. Investigaciones de Mojica et al., (1987, 1988) en rocas similares a éstas de la Formación Amoyá, en el suroccidente del Departamento del Huila, en el mismo flanco de la Cordillera Central, permitieron identificar fauna fósil del Ordovícico; por Alberto Núñez Tello
esta razón se ha postulado edad paleozoica inferior para esta unidad. Sin embargo Prössl y
Grösser (1994) describen restos de plantas y esporas del Devónico, posiblemente del Devónico medio, en rocas asociadas a esta unidad. Nuevos estudios darán luces sobre la verdadera edad.

 Rocas de Santa Teresa (Pzrst)

Barrero y Vesga (1976) utilizaron esta denominación para un conjunto de areniscas y conglomerados, con cantos de rocas metamórficas e intercalaciones de arcillolitas, que aflora en los alrededores del caserío de Santa Teresa, al sur del Líbano. Rocas similares han sido reportadas sobre el río San Romualdo y la quebrada Cay, al noroeste de Ibagué.
Las areniscas son de color gris verdoso, grano fino a medio, de composición lítica. Los conglomerados son polimícticos y menos abundantes que las areniscas. Las arcillolitas están presentes en bancos delgados y su color es gris, verde o negro.

La secuencia se encuentra, por el oriente en contacto fallado con rocas proterozoicas (Neises y Anfibolitas de Tierradentro); por el oeste el contacto es fallado con el Complejo Cajamarca. Los batolitos de El Bosque e Ibagué y pórfidos andesíticos intruyen la unidad.
Trabajos recientes de González et al., (1995), reportan la presencia de graptolites del Paleozoico inferior (Ordovícico), edad que se acepta para la unidad.


Formación El Imán (Di)

Nombre utilizado por Núñez y Murillo (1982) para describir la secuencia sedimentaria fosilífera expuesta en el cerro El Imán, al sureste de Rovira. Estas rocas fueron inicialmente reportadas por Rodríguez (1972); Forero (1970) presenta una descripción de la secuencia, así como el análisis paleontológico. La unidad consta de arcillolitas y areniscas, con algunos niveles conglomeráticos; contiene fauna del Devónico medio, aunque no se descarta que exista también del Carbonífero. Con base en lo anterior se da una edad paleozoica media a superior para la Formación El Imán.

La secuencia parece estar intruida por rocasgraníticas y cubierta discordantemente o en contacto fallado con rocas de la Formación Luisa.

Intrusivos graníticos (Pzg)

Afloran al sur de Rovira, en la cuchilla conocida como Alto del Cielo. Se tratadestocks (NÚÑEZ y MURILLO, 1982), constituidos por granodiorita con variaciones frecuentes a cuarzomonzonita y granito. En los afloramientos, normalmente, la roca se encuentra muy meteorizada con desarrollo de suelos arenosos espesos.

Las labores cartográficas (NUÑEZ et al.,1982) indican que el intrusivo está cubierto
discordantemente por la Formación Luisa, por lofue se infiere una edad paleozoica. Faure (1978), con base en análisis isotópicos Rb-Sr en roca total (Tabla 1), reporta dos edades radiométricas Memoria Explicativa del Departamento del Tolima para el Batolito de Ibagué (242 ± 72 y 305 ± 16 Ma) y una para el Stock de Payandé (305 ± 16 Ma), sin indicar la localidad en donde fueron tomadas las muestras. Estas edades marcan el rango Paleozoico tardío - Triásico temprano y pueden corresponder a estas intrusiones graníticas.

Intrusivos néisicos (Pz(?)in)

 Barrero y Vesga (1976), le dieron este nombre a un cuerpo de forma elongada que aflora al noroeste del Departamento del Tolima, sobre el flanco oriental de la Cordillera Central. Afloramientos menores se encuentran cerca al sitio de La Línea, en la carretera Ibagué - Armenia, pero por su tamaño no pueden ser representados a la escala del mapa geológico.
La unidad está conformada por rocas con minerales orientados y textura inequigranular; predomina el grano grueso y la composición cuarzodiorítica a cuarzomonzonítica. Hacia el
contacto oriental intruye rocas metamórficas proterozoicas; presenta texturas migmatíticas con una fracción ígnea y una metamórfica constituida por anfibolitas, esquistos, neises cuarzofeldespáticos
y neises calcosilicatados. Hacia el occidente intruye las rocas metamórficas del Complejo Cajamarca.
Barrero y Vesga (1976) y Vesga y Barrero (1978), mencionan una datación radiométrica de 221 ± 10 Ma para una anfibolita asociada al llamado Neis de Padua (Tabla 1); esta edad es concordante con la obtenida para cuerpos similares de la Cordillera Central, que permiten ubicarlos en el límite Pérmico - Triásico (MAYA, 1992), edad que se acepta para los intrusivos néisicos del Departamento del Tolima.

MESOZOICO

Las rocas mesozoicas, especialmente del Jurásico y Cretácico, ocurren en la mayor parte del territorio del Tolima (Figura 4). Las unidades
litológicas de estos períodos geológicos son esencialmente de carácter ígneo y sedimentario. 
Triásico - Jurásico
Las rocas triásicas afloran exclusivamente en la Cordillera Central, mientras que a partir del Jurásico se presentan afloramientos en las dos cordilleras y en los valles del Magdalena y Saldaña. Se conocen dos unidades sedimentarias, una secuencia volcanosedimentaria
y numerosos cuerpos intrusivos e hipoabisales.
Formación Luisa (Trl).
          Esta unidad fue descrita inicialmente por Renz (in TRUMPY, 1943) como "Pre-Payandé Red Beds"; Nelson (1959) la denomina Formación Pre-Payandé. Geyer (1973) la redefine proponiendo, por primera vez, el término Formación Luisa y dio como localidad tipo los afloramientos del río Luisa, al sureste de Rovira. Cediel et al., (1980, 1981) proponen la adopción formal del nombre sugerido por Geyer (op. cit.).
Aberto Núñez Tello Aflora en las estribaciones orientales de la Cordillera Central, entre el río Coello, al norte, y la Cuchilla La Tigrera, al oeste de Chaparral. Las mejores exposiciones se encuentran en los ríos Luisa, Cucuana y Tetuán; en este último, al nororiente de la cabecera municipal de Chaparral. Está conformada por conjuntos de capas rojas ("red beds"), constituidos por shales, limolitas, areniscas de grano fino hasta grueso, a veces conglomeráticas, de composición arcósica y subarcósica, conglomerados brechosos y brechas polimícticas, cortadas frecuentemente por diques de composición ácida y básica. El espesor de la unidad no está muy bien establecido debido a complicaciones tectónicas, dándose cifras entre 150 m (RENZ, op. cit.) y 600 m (CEDIEL et al., 1980, 1981). El contacto inferior ha sido observado en el río Luisa y el Alto delCielo, en donde es discordante sobre migmatitas. 

El contacto superior es discordante con la Formación Payandé. Debido a la ausencia de fauna la unidad no ha sido datada con precisión; la edad que se le asigna es relativa con respecto a la suprayacente y discordante Formación Payandé, del Triásico (Noriano) y la posición, también discordante, sobre sedimentitas paleozoicas devónicas y posiblemente carboníferas de la Formación El Imán. Esta situación da como resultado un lapso comprendido entre el Pérmico y el Triásico superior, para la sedimentación de la Formación Luisa.
El ambiente de depósito de la unidad ha sido determinado como continental fluviátil; Geyer (1973) acepta esta interpretación y deja abierta la posibilidad de que algunos estratos puedan ser de origen marino. En las rocas de la Formación Luisa se conoce la mina de Pavo Real, en donde se presentan fracturas y microfracturas rellenas por materiales auríferos, provenientes de cuerpos intrusivos.

Formación Payandé (Trp).

Fue así denominada por Renz (in TRUMPY, 1943)en la región de Payandé; aflora exclusivamente en la Cordillera Central, entre el río Coello, al norte y los límites con el Departamento del Huila, en
la zona de Santa Rita.

Excelentes exposiciones de la unidad se encuentransobre los ríos Coello, Luisa, Amoyá y Saldaña, así como en la carretera Chaparral -
Puente de Las Señoritas. Los afloramientos más conocidos se aprecian en la región de Payandé - El Salitre, en el centro del departamento.
Consta casi exclusivamente de calizas grises ynegras, con matices azulosos e intercalaciones menores de areniscas, limolitas, arcillolitas y
margas. Las calizas son localmente fosilíferas y brechosas. Los niveles arenosos y clásticos son comunes hacia la parte superior y los materiales limolíticos en la parte inferior; esto permitió a Mojica y Llinás (1984) separar la unidad en los Miembros Inferior y Superior.

El contacto inferior es discordante sobre la FormaciónLuisa. La Formación Payandé es intruidapor el Batolito de Ibagué y el Stock de Payandé,que producen marmorización y zonas de skarn.Memoria Explicativa del Departamento del TolimaEl contacto superior con la Formación Saldaña,es concordante y parece tener caráctertransicional, con la aparición gradual de materialvolcánico que representa el vulcanismo de la"Época Saldaña", de acuerdo con la interpretación
de Mojica y Llinás (1984), Mojica y Dorado(1987) y Rodríguez y Rodríguez (1990). El espesor de la unidad, dado por los diferentes autores que la han estudiado, varía notablemente entre 150 m (GEYER, 1973) y 600 - 700 m (CEDIEL et al., 1980, 1981).
La edad está bien establecida, gracias al abundante contenido de fauna fósil, entre la que sobre salenamonitas y lamelibranquios, que le permitieron a Geyer (1973) determinar edad Norianoy la posibilidad de Carniano en la parte inferior, y Retiano en la parte suPerior. También se encontraron briozoos y corales.

La Formación Payandé fue depositada en un ambiente marino de aguas someras y tranquilas, con circulación y oxigenación de aguas restringidas temporalmente (CEDIEL et al., 1980). Las calizas de la Formación Payandé son utilizadas para la producción de cemento y cal. Las zonas marmorizadas son intensamente explotadas para la obtención de rajón y retal de mármol, muy ocasionalmente bloque. Los "skarns" de Mina Vieja y El Sapo, se explotaron en el pasado, para cobre y otros metales; en la actualidad estas explotaciones están abandonadas. 

Formación Saldaña (Jsv-Jsp).

Esta unidad fue denominada, originalmente, por Renz (in TRUMPY, 1943) como "Post-Payandé Red Beds"; posteriormente Geyer (1973) propuso el nombre de Formación El Salitre y, finalmente, Cediel et al., (1980, 1981), la redefinieron como Formación Saldaña, y localizaron la sección tipo sobre la carretera Ataco - Planadas. Mojica y Llinás (1984) y Mojica y Dorado (1987), dividen la Formación Saldaña en dos miembros: la parte superior de carácter volcánico, Miembro Prado
y el conjunto sedimentario inferior, Miembro Chicalá. Para la representación cartográfica y debido a la escala del mapa, la Formación Saldaña se representa como Jsv, que corresponde
a la parte volcánica con intercalaciones sedimentarias, y Jsp las rocas porfiríticas. La Formación Saldaña aflora, en el Departamento
del Tolima, a manera de bloques discontinuos, tanto en la Cordillera Central como en los valles de los ríos Saldaña y Magdalena y la Cordillera Oriental.

Las mejores exposiciones se presentan al suroccidente de Natagaima, en el carreteable a la Vereda Monte Frío y en las carreteras Prado - Dolores, Ataco - Planadas y Planadas - Aipe. La parte volcánica (Jsv) consta de tobas de ceniza y lapilli y aglomerados de composición lítica,
vítrea o cristalina, flujos de lava andesíticos a riolíticos e intercalaciones de areniscas tobáceas, areniscas feldespáticas y lutitas rojizas. También se encuentran zonas conglomeráticas con can28
Alberto Núñez Tellotos de caliza y limolita, areniscas sucias, limolitas
grises y verdosas, calizas bioclásticas, limolitas, lodolitas, areniscas finogranulares y chert, que conforman los Miembros Chicalá (MOJICA y LLINÁS, 1984) y la secuencia de Monte Frío(RODRÍGUEZ y RODRÍGUEZ, 1990).

En el Miembro Prado, Mojica y Macía (1982a)descubrieron pisadas de vertebrados, posiblementeBatrachopus cf. Dewey del Triásico superior
- Jurásico medio (?) (MOJICA et al., 1995).

Mojica y Llinás (1984), con base en fósiles(bivalvos, amonitas, corales y restos de crinoideos), asignan al Miembro Chicalá edad retiana. Rodríguez y Rodríguez (1990), encontraron en Monte Frío (suroccidente de Natagaima) conchostracos (Cyzicus?) y ostracodos del género Darwinula, clasificados por Beck and Senff (1994, in MOJICA y KRAMMER, 1995), como Darwinula sp. y "Rabdsotichus" sp., que pueden indicar de acuerdo con Rodríguez et al.,(1995)
Liásico (Jurásico Inferior) para estas rocas. CoN estos datos, la edad de la Formación Saldaña marca un lapso desde finales del Triásico hasta el Jurásico medio.
Los cuerpos hipoabisales (JSp) son de composición andesítica a dacítica, de tamaño variable, sin superar 10 km² de área; están constituidos por rocas porfiríticas que intruyen la Formación Saldaña y que tienen una íntima relación con el vulcanismo. Los fenocristales varían en tamaño desde milímetros hasta varios centímetros, siendo
mas frecuentes las rocas con fenocristales grandes de plagioclasa con augita subordinada.
La matriz es afanítica a microcristalina; algunos cuerpos tienen amígdalas rellenas con calcedonia o cobre nativo y clorita. El hecho que estos cuerpos hipoabisales intruyan depósitos volcano-sedimentarios de la Formación Saldaña, junto con el carácter discordante de la Formación Yaví (Cretáceo inferior) sobre algunos
de ellos, permiten postular edad jurásica para éstos, lo que sugiere un asociación estrecha entre la Formación Saldaña y el magmatismo
jurásico de la Cordillera Central de Colombia.
En las rocas de la Formación Saldaña son frecuentes las manifestaciones de barita; algunas de ellas fueron explotadas en el pasado. También se conocen mineralizaciones de cobre nativo en Natagaima y Dolores. En Natagaima también se ha reportado fluorita.

Intrusivos (JI - Jd - Jn - Ja - Jp - Jsc ).
Se describen bajo esta denominación cuerpos intrusivos, que afloran en las cordilleras Central y Oriental, así como en el Valle del Magdalena. Estos cuerpos ígneos intruyen las rocas metamórficas precámbricas, desarrollando algunas veces "skarn", como el existente sobre la quebrada Chorros Blancos, afluente del río Cocora al SW de Ibagué, así como zonas migmatíticas. También intruyen las rocas calcáreas de la Formación Payandé originando zonas de "skarn", como las de Mina Vieja (Payandé), El Sapo (Valle de San Juan) y Copete (Chaparral), así como zonas de mármoles. Las rocas volcanosedimentarias de la Formación Saldaña son también intruidas por estos plutones. En varios sitios del valle del Magdalena se observa a la Formación Yaví reposando sobre ellos. El trabaMemoria Explicativa del Departamento del Tolima jo cartográfico permitió diferenciar los siguientes cuerpos: Batolito de Ibagué (JI). Es la unidad geológica de mayor extensión en el área departamental. Sus afloramientos, situados siempre en la Cordillera Central, comprenden una franja continua desde un poco al norte de la destruida población de Armero, hasta el sur y suroccidente de Planadas. 
Su nombre se debe a Nelson (1959). Prácticamente en todas las carreteras y corrientes de agua que cortan el flanco oriental de la cordillera, se encuentran exposiciones del intrusivo. Con mucha
frecuencia la roca se halla entre mediana y altamente meteorizada, dando un saprolito arcilloarenoso a areno-arcilloso profundo.
Composicionalmente muestra un amplio rango de variaciones, desde tonalita hasta monzogranito, pasando por cuarzodiorita, granodiorita,
monzonita y cuarzomonzonita. La roca más común es de color gris, moteada de negro, de grano medio a grueso y compuesta por cantidades variables de cuarzo, plagioclasa y feldespato potásico; hornblenda y biotita son los minerales oscuros acompañantes y su contenido rara vez supera, en conjunto, el 10% del total de la roca,
con predominio de alguno de ellos por sectores aún no muy bien establecidos.
La edad del Batolito de Ibagué parece estar muy bien documentada; se conocen varias dataciones isotópicas (Tabla 1) que lo ubican en el rango 131 - 151 Ma, que  corresponde al Jurásico medio a superior.
En varios sitios del departamento, especialmente en los alrededores de Ibagué, se explota la roca meteorizada para obtener arena de peña o
arena lavada; algunas veces el material residual es utilizado para la elaboración de ladrillo común, pero el alto contenido de arena hace que las piezas sean de calidad regular. En diversas regiones, especialmente cuando el intrusivo se presenta muy afectado por fracturamiento, se utiliza como material para afirmado de vías; ejemplo importante son las canteras localizadas en la vía Ibagué-Cajamarca, que abastecen las necesidades de la capital departamental. Algunas zonas ácidas del intrusivo suministran material feldespático para utilización en la fabricación de vidrio y cerámica, como las minas El Vergel y Los Cacaos, en los alrededores de Ibagué.
En la zona de Rovira se encontraron zonas con venas y venillas de cobre y molibdeno, que hicieron pensar en la presencia de depósitos
de cobre porfirítico; las investigaciones realizadas descartaron la utilidad económica de las manifestaciones. Stock de Payandé (Jp). Aflora al occidente de Payandé, en la zona central del departamento.
Los afloramientos más importantes se encuentran sobre el río Frío y la quebrada El Salto y demás afluentes.

FUENTE: INGEOMINAS 

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